Este fin de semana, en el Hogar de Cristo San José, se vivió una jornada de solidaridad y cooperación gracias a la generosa colaboración de la Fundación PRIAR de los empleados del Banco Galicia. En un esfuerzo conjunto, se trabajó intensamente para mejorar la infraestructura del hogar, logrando así un espacio más acogedor y seguro para sus residentes. Sin embargo, más allá de las mejoras materiales, lo más valioso fue el vínculo que se fue tejiendo entre los colaboradores y los jóvenes del hogar. Esta interacción permitió construir lazos de confianza y empatía, fortaleciendo la comunidad y dejando una huella profunda en todos los involucrados. Fue un día que no solo transformó el entorno físico del Hogar de Cristo San José, sino también el corazón de quienes participaron.
